Casi un año sin cine, Covid 19 y cambios en la industria

Casi se cumple un año en que paulatinamente las salas de cine fueron cerrando producto de la pandemia por Covid 19.

Tras el avance de la infección por el mundo, no solo se vieron afectados los distribuidores con el cierre de los cines, sino también toda la industria relacionada, con posposición o cierre de producciones y la posposición de estrenos programados para este 2020.

Si bien han habido producciones que han optado por continuar con su estreno pero en formato streaming. Para los amantes del séptimo arte es una lástima, pues varias producciones fueron pensadas en el gran formato y su cambio de plataforma influye en la experiencia del espectador.

Se ha especulado con que con esta gran crisis es posible que el cine muera, pero discrepo de dicha opinión. Principalmente por el hecho de que la experiencia del cine en sala, es una experiencia social muy difícil de replicar en los formatos caseros. La experiencia es personal, pero los factores colectivos que influyen en la misma, difícilmente se podrían replicar en casa. Incluso aquellos menos cómodos como lo son aquellos espectadores conversadores o que interrumpan  durante la cinta son parte de esta gran experiencia.

El disfrutar una película sin la interferencia del timbre, teléfono y todos los distractores que podrían haber en una casa, con sonido envolvente, oscuridad e imagen acorde, hacen que uno pueda ver y sentir la película de maneras particulares. Por ese motivo creo que es difícil que el cine propiamente tal muera, aunque puede que el camino natural es que cambie. Probablemente tenga que acostumbrarse a competir con otros formatos sin la brecha de tiempo entre estrenos en streaming u otros formatos domésticos. Algo que ya había ido ocurriendo y generó polémica  hace unos meses con cadenas de cine anunciando vetos a determinados títulos por dicha política de estrenos en paralelo. Es verdad que probablemente influya este nuevo escenario en el corte de tickets, pero si la salas se reinventan, puede que ocurra como pasó  con el vinilo en la industria discográfica. Casi al borde de la desaparición, ha tenido un resurgimiento de la mano de una reinvindicación y reinventarse con un enfoque distinto hacia su público objetivo.

Es válido que para algunas personas el formato en que se disfrute el cine no sea importante o prefieran el streaming por sobre las salas, es un tema de gustos. Pero creo que antes de ser amenaza, esta nueva realidad, es una oportunidad, que en unos años veremos más claramente cuál será su efecto. Esperemos sea positivo.

El cambio será inminente, pero tal como ocurrió con el formato físico, que bajó sus ventas en gran medida por el acceso a los mismos títulos por medio del streaming.  Hoy hay un regreso de las ventas. Enfocado en un público más específico, amante del séptimo arte y que ve en los cambios de edición por diversas razones dentro de las cadenas de streaming, una amenaza al producto que vivió en salas de cine o sin ellas. Busca revivir la experiencia de la primera vez que vio la cinta sin cambios, o tal vez gusta de una versión particular como la del director, por ejemplo. Pero finalmente es un público mucho más específico respecto a los motivos de compra. Conocido fue el caso de “Lo que el Viento se Llevó” y su rechazo a la forma de manejar la esclavitud dados los tiempos actuales. Muchos fans agotaron la película por temor a ser sacada de catálogo y no ser nuevamente vendida o exhibida como pasó con Dumbo o Los Aristogatos en el caso de Disney + .

Hoy nos queda esperar las estrategias de los cines y la industria a medida que se permitan las reaperturas. Cuánto queda para eso es el gran misterio, espero que sea más pronto que tarde. Los grandes estrenos tendrán que esperar, pues claro está qué tal cómo está la situación, estrenar en tres cines abiertos y no a nivel nacional por las diferentes fases, comercialmente no es conveniente. Con la llegada de la vacuna hay una nube de esperanza, si bien habrá que seguir cuidándose, es un indicio de buena nueva entre tanta mala noticia. Pero claro está que demorará mucho en llegar a una inmunidad de rebaño todavía.

Por mientras disfrutemos en casa y esperemos que los títulos favoritos que se estrenaron en pandemia, tengan alguna vez su función en sala. Para románticos del cine como yo y muchos de los que hacemos este apasionado blog que se llama CanalFreak.