“¿Es un héroe, un villano, o algo completamente distinto?”
Esta revisión incluye detalles de la historia y comprende el número individual The Big guy.
En Japón, los científicos han conseguido sintetizar el caldo de cultivo de la vida, y con ello crear vida desde cero. Esta maravilla científica podría llevar a la humanidad a un nuevo nivel, casi rivalizando con los dioses.
La historia
Desde luego, todo sale mal, y a partir del momento en el que el experimento se pone en práctica, las cosas se salen de control y nace una creación terrible y peligrosa.
Lo que ha nacido es un monstruo gigantesco, del porte de un edificio, que tiene inteligencia propia, y objetivos muy claros. Pertenece a una antigua raza de seres colosales, y ha estado durmiendo en el planeta, a la espera de una oportunidad; esto significa que cuando los humanos desarrollaron la tecnología, el monstruo la utilizó para despertar de su letargo. Ahora va a conquistar y destruir a la raza humana, aprovechando además sus poderes para convertir personas en monstruos que lo asistan en la conquista.
Las fuerzas de defensa intentan todo para destruir a la amenaza, pero son incapaces contra su gruesa piel, sus poderes y su gran capacidad de reflejos. Así las cosas, envían a enfrentarlo a Rusty, un niño robot creado, como la última máquina de defensa; el pequeño, que tiene una personalidad propia, usa todo su poderío para enfrentar a la amenaza, pero cae sin poderlo evitar.
Es momento de pedir ayuda.
Desde luego, la única ayuda posible viene de norteamerica, donde han desarrollado a Big guy, una maravilla tecnológica que no solo tiene forma de robot e inteligencia de humano, sino que además cumplirá con su misión defendiendo los ideales de su país, que por supuesto son eliminar al rival, salvar vidas y no desperdiciar los impuestos que se han invertido en su creación.
La batalla es dura, ya que el monstruo no solo tiene fuerza física, sino que además puede leer la mente del noble héroe y tratar de distraerlo. En cualquier caso, Big guy demuestra su nivel de entrenamiento, siendo capaz de poner su mente en blanco, y usando todo su poder, derrota al invencible enemigo. Aún así, debe enfrentar un peligro adicional, ya que hay numerosos humanos infectados por el monstruo, y aunque se hayan convertido en aberraciones, es deber de nuestro héroe evitar a toda costa dañarlos.
Una vez logra incapacitar a estos secuaces, Big guy debe enfrentar de nuevo al monstruo en una definitiva batalla final, que culmina con una gran explosión, el triunfo del héroe americano y el eterno agradecimiento del mundo y de los japoneses. Estos últimos le entregan a Rusty como acompañante a nuestro héroe, lo que dará paso a nuevas aventuras en defensa de la justicia y el sueño americano.
Este cómic es una fumada genial, porque hace uso de todos los clichés de las películas o cómics norteamericanos y japoneses y los usa para dar cuerpo a una historia que eleva todo por sobre los límites. Es cínica y descarada en poner frases rimbombantes, americanadas como decir que hay que proteger a los civiles por sobre todos, y japonesadas como defender el honor hasta el ridículo; este tratamiento es ayudado en todo momento por un dibujo que, como podrán ver en la galería, se aleja tanto de la estética manga como de los cómics más vendidos en Norteamérica. La paleta de color, muy lejos de los super vibrantes colores habituales en los grandes títulos, hace que veamos un mundo bastante realista, donde no hay cuerpos ni poses perfectas. Es curioso, porque la narrativa presenta una historia over the top, de heroísmo super típico, pero lo que estamos viendo se burla del discurso y disecciona el mensaje real.
Por supuesto, al tener la libertad de no ser una historia llevada por una casa editorial gigante, existe la libertad de incorporar miles de referencias a la cultura popular, llegando a mostrar afiches en las calles que “reaccionan” a lo que está pasando. La parte donde el ayudante está recitando normas como azafata mientras Big guy pelea de fondo, y la gente en la playa no los toma en cuenta, es un verdadero lujo.
Solo por mencionar algunas de las docenas de referencias que contiene esta obra, hay unas muy claras a Astro boy, Godzilla, Zilla y al estilo Michael bay. También hay referencias visuales a la tecnología steampunk y a la cultura post terror a los peligros de la bomba atómica.
Equipo creativo
Esta delirante historia fue escrita por Frank Miller y Geof Darrow, con arte de Geof Darrow, color de Dave Stewart, textos de Bill Spicer y Peter Doherty, además de la colaboración de Geof Darrow y Xavier Giacometti en el diseño del logo.
Para finalizar, dejo una interesante galería de imágenes de esta obra. No tiene desperdicio.
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