Sinopsis: Un tierno Osito, atraído por todo lo británico, viaja a Londres en busca de un hogar. Cuando se pierde en la estación de trenes Paddington, se da cuenta que la vida en la ciudad no es lo que se imaginaba… hasta que conoce a la cariñosa familia Brown. Parece que su suerte ha cambiado, ¡cuando capta el interés de la taxidermista del museo!
Mucha gente no ha escuchado jamás sobre este oso o, sólo han visto el tráiler y no les llamó la atención. Si están dentro de ese grupo, les recomiendo seguir leyendo porque realmente la película es mucho mejor de lo que creen. Si por el contrario, tienen ganas de ir a verla al cine, acá les daré más motivos por los cuales hay que verla.
Paddington es un personaje literario infantil muy famoso entre los niños británicos. Sus libros también están en español pero acá en Chile no es tan conocido. Yo nunca leí ninguno y realmente no es necesario hacerlo para ser cautivado por esta cinta, ya que acá explican todo desde cero.
Hace mucho tiempo, un explorador británico viajó al «lejano Perú» y se encontró con una selva. Es acá donde conoce a dos osos salvajes pero, muy amigables. El explorador les enseñó un poco sobre su cultura y les dijo que algún día debían viajar a Londres y que ahí serían muy bien recibidos.
Al pasar los años, los osos aprendieron a hablar, escuchando los discos que el explorador les dio de regalo. Tomaban té y comían mermelada. Es en esta escena donde conocemos al pequeño Paddington. Nos cuentan que los dos osos mayores son su tíos, que todos saben hablar idioma humano y que sueñan con visitar Londres.
Un día ocurre una horrible tragedia y Paddington se ve obligado a huir solo del país. Él tiene la convicción de que llegará a un lugar donde será bien recibido y en el cual podrá encontrar un nuevo hogar pero, se encuentra con una realidad completamente distinta a lo que le habían contado.
Es en estos momentos cuando comienza la historia…
Conocemos a la familia que lo acoge, a los vecinos y a una persona malvada que sueña con disecar a nuestro pequeño protagonista.
Es una comedia porque al oso le suceden muchas cosas que nos hacen reír, pero no son chistes tontos ni sucios, simplemente son situaciones adorablemente divertidas.
La película dura aproximadamente 90 minutos, pero debo reconocer que se pasan demasiado rápido. La historia es muy ágil, sucede una cosa tras otra y no son hechos repetitivos o de relleno. Poco a poco vamos descubriendo más datos y la historia comienza a cerrarse, hasta llegar al gran final.
Como en toda cinta familiar, tiene muchos momentos divertidos pero, también cuenta con su cuota de momentos conmovedores. Yo soy super sensible cuando se trata de animales y debo reconocer que derramé un par de lágrimas en dos escenas. Paddington logró robarme el corazón.
Una de las cosas que más valoro es la animación. En esta época digital, suelen crear personajes que se ven falsos, pero acá no sucedió. La piel, los movimientos y los ojos de este encantador oso se ven reales. De hecho su mirada me recordaba a la de mi perro.
Tiene bonitos mensajes sobre la familia y sobre no rendirse jamás.
Realmente es una muy buena película, recomendada para personas de todas las edades.
Véanla y me comentan que tal les pareció, porque yo la he comentado con mis amigos y a todos les gustó mucho.
Espero que salgan con una sonrisa de la sala de cine tal como me sucedió a mí.
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