Siguiendo con los estrenos de agosto que Netflix nos trae, esta vez es turno de la acción de la mano de Proyecto Power, película dirigida por Henry Joost y Ariel Schulman, conocidos por dirigir Actividad Paranormal 3 y 4, y Nerve: Un juego sin reglas. Sus protagonistas son los reconocidos Jamie Foxx, Joseph Gordon-Levitt, Dominique Fishback, Machine Gun Kelly y Rodrigo Santoro.
“En New Orleans, un exsoldado, una adolescente y un policía se unen para seguir el rastro de una peligrosa pastilla que otorga superpoderes temporales.”
Con esa premisa la plataforma de streaming presenta su película, una que te dejará con los ojos clavados a la pantalla gracias a sus escenas de acción recurrentes, sus tonos de superhéroes y mucha violencia explicita.
En las calles de New Orleans circula una poderosa y riesgosa droga llamada “power”, pastilla que le otorga a la persona que la consume superpoderes por un tiempo de cinco minutos. Estos poderes varían dependiendo de la persona, inspirándose en los dotes de los animales como el camuflaje, resistencia a temperaturas extremas, regeneración del tejido muscular etc. Sin embargo, la droga no es apta para todos, pues aun está en periodo de prueba, por lo que algunos al consumirla mueren al instante de sobredosis. Esta droga fue posible de producir gracias a la hija del personaje principal: Art (Foxx), quien está dispuesto a todo por volver a encontrarla.
Los otros dos personajes son Robin (Fishback), una adolescente que trafica la droga para pagar la costosa enfermedad de su madre, y Frank (Gordon Levitt) el policía, cliente de Robin que busca nivelar la cancha ante la oleada de crimen en la ciudad debido al descontrol producido por la sustancia.
La cinta logra su propósito de entretener con una historia que no tiene frenos, tras una escena de acción viene la otra, dejando muy poco espacio para explicar, lo cual a veces se puede sentir como que todo convenientemente resulta para los protagonistas, perdiendo un poco el sentido de la lógica, pero logrando darle fluidez para destacar los poderes concedidos por la droga. Esta fluidez hace que las casi dos horas de película no se sientan, con la adrenalina a tope entre golpes, balas y persecuciones.
Si bien se siente emocionante y llevadera, no pude evitar pensar en la película Sin Límites con Bradley Cooper, que también nos muestra cómo una droga impulsa nuestras capacidades humanas, siendo esta última mucho mejor lograda. Y este tal vez es uno de los mayores problemas de Proyecto Power, al no darse el tiempo de construir una historia y solo apostar por la acción, no desarrolla una trama sólida que podría haber tenido mucho más potencial, desperdiciando una premisa interesante.
No obstante, Proyecto Power sale bien parada en esta ocasión entregándonos buenas escenas de combate que no se detienen, siendo un buen panorama para una tarde cargada de explosiones y peleas protagonizadas por talentosos actores. Ojo, que muchas de las escenas contienen violencia explicita, mostrando heridas de bala abiertas, por lo que no la recomendaría para personas muy sensibles o los más chicos del hogar.
Proyecto Power ya se encuentra disponible en Netflix, denle una oportunidad y cuéntenos que les pareció. ¡Los leemos!
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