Esta vez quiero llevarlos de regreso a 1983, año en que sucedieron hechos como la inauguración del mítico Mundo Mágico en Lo prado o el traslado de Canal 13 a las instalaciones que lo alberga en la actualidad; resulta curioso que en una época en que nuestra sociedad estaba aprisionada por dogmas algo conservadores, haya sido un hombre super musculoso en tanga el encargado de traer algo de luz y diversión a los niños y los no tanto.

Amparada por el apabullante éxito de la serie de animación, Salo nos permitió tener en nuestras manos una selección de las mejores aventuras de nuestro héroe de Eternia.

Al igual que en la serie, el álbum nos contaba las aventuras del príncipe Adam de Eternia, quien ocultaba bajo su aspecto de pulcro heredero al trono una identidad mucho más aguerrida: He man, el todopoderoso guerrero encargado de defender a su mundo de las villanías de Skelletor y su pandilla de terribles seguidores. Dotado de una espada canalizadora de su poder, algo de ropa, un tigre verde acorazado y un bronceado digno de ganador de competencia de físico culturistas, el héroe máximo del planeta debía enfrentar todo tipo de dificultades para vencer al mal, siempre contando con la ayuda de su experimentado amigo Man-at-arms, los ingenios locos de Orco, la mística asistencia de la hechicera Sorceress, y desde luego Teela, capitana de las fuerzas de palacio y una guerrera del más alto nivel.

Usando la libertad creativa de un mundo de fantasía, teníamos la vista de castillos antiguos, animales mitológicos, armas místicas y todo tipo de seres vivos, lo que sin duda era un soplo de aire fresco para la generación de ese entonces; llama la atención el diseño de personajes humanos, que era muy fiel a las proporciones reales, tomando como ejemplo a hombres y mujeres con una musculatura desarrollada, y que los atuendos fueran una mezcla de elementos clásicos de guerreros medievales –de ahí la sunga peluda de He man o las botas con borde de piel-, y otros que pertenecen al mundo de la ciencia ficción como arpones, ganchos o disparadores ocultos en brazaletes. Todo este conjunto visual resultaba atractivo para los niños, ya que en cierto modo recrea las fantasías y juegos infantiles de muchos de nosotros. También hay que destacar que, a pesar de ser una serie protagonizada por un hombre, Teela es un personaje femenino entrenada con las mejores técnicas, lo que le da su rango en palacio por derecho propio, siendo fuerte y determinada en su actuar; un paso adelante en comparación con algunas damiselas en peligro.

Por supuesto y al igual que en la serie, el álbum mostraba una lección de vida o una forma de aprendizaje: se trata de un producto orientado a la entretención, pero que incorpora un mensaje acerca de la superación personal, que explica que, incluso teniendo todo el poder a disposición, siempre se puede necesitar la ayuda de quienes son tus seres queridos.

Los dejo con una selección de imágenes de este álbum, porque recordar es volver a vivir.

             

                                   

 

 

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