[Reseña] «El Escándalo»: El otro capítulo de #MeToo

• Título: El Escándalo
• Director: Jay Roach
• Elenco: Charlize Theron, Nicole Kidman, Margot Robbie

Rating: 4/5

SINOPSIS:

La historia de las mujeres que denunciaron al predador sexual y director ejecutivo de Fox News, Roger Ailes.

RESEÑA

Las acusaciones a Harvey Weinstein por acoso y abuso sexual sacudieron Hollywood y el resto de Estados Unidos. Que un hombre tan grande y poderoso como Weinstein, productor de Miramax Films y The Weinstein Company, fuera expuesto y juzgado luego de años significaba que nadie estaba libre. Y así luego de Weinstein cayó otro grande del entretenimiento en Estados Unidos: Roger Ailes.

El público chileno de seguro desconoce este nombre (yo lo hacía). Ailes estuvo a cargo de la cadena Fox News por casi 20 años, y durante su cargo acosó y abusó de un importante número de mujeres que pasaron por la industria de la televisión. Aquella es la historia que relata El Escándalo (Bombshell en inglés).

El Escándalo ya parte como un gran desafío. Posterior al movimiento #MeToo en Hollywood, esta es la primera gran película en abordarlo en forma de ficción (son hechos reales, pero finalmente dramatizados). El primer gran acierto de Jay Roach, su director, fue elegir un elenco tan potente. Charlize Theron interpreta a Megyn Kelly, una de las más caras más importantes de Fox News, y quien vemos que detrás de un exterior fuerte e inflexible esconde un secreto de abuso que ha afectado su vida. Theron es perfecta para el rol, una camaleón (en este caso debió usar prótesis en su cara para parecerse más a Kelly) capaz de sumergirse en un personaje complicado que por un lado tiene las agallas de interpelar a Donald Trump en Fox News, y por el otro arrastra un abuso hacia su persona de muchos años.

Junto a Theron está Nicole Kidman, quien interpreta Gretchen Carlson, la primera víctima en hacer pública su denuncia contra Aisle. Kidman hace un buenísimo trabajo, aunque pasa mucho más desapercibido. La tercera parte de esta trifecta es Margot Robbie, quien en esta ocasión es Kayla Pospisil, una pasante en Fox News que busca ser un nombre reconocido en la televisión. Robbie interpreta a su personaje con una inocencia ya característica que funciona muy bien, y es ella quien logra robarse el protagonismo con escenas que muestran las profundas heridas que deja el abuso sexual en una persona.

El segundo acierto se da en la historia de cada personaje. A pesar de que mucha de la promoción incluye a estas tres mujeres, no son muchas veces las que estas coinciden en cámara. Roach se dedica más a contar sus historias de forma paralela, lo que de cierta forma evidencia mucho más lo profundo que caló el círculo de Ailes, el gran número de personas que perjudicó con su comportamiento, y cómo cada una de estas mujeres, aunque compartían historia, debieron por mucho tiempo luchar una batalla solas.

Otros aciertos se dan en la forma en que Roach desenvuelve su gran historia, es decir, “el escándalo”. Esta película es una historia de abuso, pero es interesante que este se da en uno de los peores y más conservadores ambientes de Estados Unidos. Fox News es un canal con mucho dinero, influencias religiosas y morales, y que tuvo un rol protagónico en ayudar a Donald Trump a ganar la presidencia en Norteamérica. Megyn Kelly, a pesar de su historia y de su aparente disgusto por Trump, también contribuyó, junto a todo Fox News, a que dicho hombre -que también tiene denuncias por abuso sexual- llegara a la silla más alta de los Estados Unidos. Roach busca contar una historia de abuso y eso lo hace bien, pero en este caso en específico también se pregunta: ¿Se puede ser víctima y además perpetuador? ¿Qué triunfa, la sororidad o la búsqueda por poder?

Es una película, dentro de todo, hecha con respeto y eso se aprecia. Existen escenas donde se habla expresamente del abuso, pero nunca se recae en el morbo; además de que en los casos en donde se va más allá es porque es necesario para nosotros como espectadores verlo. Me atrevo a decir que uno de los únicos errores de El Escándalo se da en el área técnica: un manejo de cámara más característico de serie de televisión o, en otras palabras, muchos zoom innecesarios que me recordaron a The Office y que en algunos momentos lograron distraerme de lo que veía en pantalla. Obviando eso, El Escándalo es una película sólida con geniales actuaciones, dignas de ser nominadas en esta temporada de premios.