[Reseña] El Precio de la Verdad: la larga lucha de una historia real

SINOPSIS

Inspirada en una historia real, la película se centra en la figura de Robert Bilott, quien tras ejercer durante ocho años como abogado corporativo cambió de bando para enfrentarse en los juzgados a la todopoderosa multinacional DuPont Corporationpor sus prácticas poco respetuosas con el medio ambiente. En el proceso arriesgó todo, su futuro, su familia y su propia vida, para exponer la verdad.

RESEÑA

Vivimos en un mundo donde los avances científicos no paran de sorprendernos, sacando productos que al parecer hacen nuestras vidas más fáciles, pero ya deberíamos saber que esto viene con un costo que en algún momento tenemos que pagar. Con una cruda y potente historia, Todd Haynes trae a la pantalla grande el artículo del The New York Times “The Lawyer Who BecameDuPont´s Worst Nightmare” (El abogado que se convirtió en la peor pesadilla de Dupont)

Robert Bilott era un abogado corporativo con una carrera en alza al ser recientemente promovido a socio de su compañía, todo parecía ir bien hasta que un granjero, que era conocido de su abuela, aparece en su firma pidiendo ayuda lo cual lo lleva a descubrir un terrible caso de negligencia ambiental por parte de DuPont, la multinacional de productos químicos, descubriendo que la compañía ha dejado residuos de un químico cerca de distintas fuentes de agua en Virginia Occidental, envenenándolas sin que nadie lo sospeche. Es así como comienza una larga pelea que duró cerca de veinte años.

El químico en cuestión es el C8 o PFOA, desarrollado para impermeabilizar tanques en la Segunda Guerra Mundial y luego usado en una variedad de productos, entre los que estaban los recubrimientos antiadherentes de las ollas (teflón), tapetes, utensilios domésticos y ropa. Al ser basada en una historia real, a medida que iban pasando los hechos no pude evitar cuestionarme que muchos de los productos mencionados estaban en mi hogar, dándome cuenta de lo desprotegidos que estamos ante químicos silenciosos que tal vez nunca sabremos del daño que nos causan. La película logra retratar esto de manera eficaz al dejarnos claro que para las compañías somos solo ratas de laboratorios que difícilmente sabrán que están siendo envenenados, y aunque lo supiéramos no hay mucho que podamos hacer al respecto. 

La forma en que la historia es contada tiene un propósito: dejarnos ver lo lento que son los procesos judiciales y lo frustrante que es el camino para obtener la justicia. Es en un abrir y cerrar de ojos que Robert está casado, luego tiene un hijo, más tarde dos y finalmente tres, hijos que vemos como rápidamente van creciendo mientras su padre lucha por ganar el caso. Son tantos los años que transcurren que su vida termina viéndose afectada tanto en el ámbito laboral, familiar y su salud. Es una lucha de David contra Goliat.

Sin duda alguna Bilott es el héroe, al nunca dejar de luchar por obtener justicia para el pueblo de Virginia Occidental. Es un duro relato de cómo muchas veces los que empiezan una causa no alcanzan a vivir lo suficiente para ver los frutos, pero que a la larga terminan haciendo más de lo que cualquiera esperaba. Tiene un ritmo lento que nos muestra lo exhaustiva que es el proceso investigativo, sumando a esto la recolección de evidencia, lo cual logra unir perfectamente los pequeños acontecimientos a lo largo de la cinta, teniendo momentos de alta tensión y angustia.

El Precio de la Verdad es una película que transmite muchos sentimientos sobre el mundo en el que vivimos, demostrando que el medio ambiente y la salud de las personas son solo un daño colateral para los gigantes corporativos. Con una historia emocionante, liderada por la impecable actuación de Mark Ruffalo, llega a las pantallas una historia que todos debiésemos ver.

Si les gustó la película los dejo invitados a leer el artículo en que fue inspirada, lastimosamente no lo pude encontrar en español, pero si se animan se los dejo aquí

No se pueden perder El Precio de la Verdad, disponible en la cartelera a partir de este jueves 12 de marzo. La invitación está hecha queridos freakies, ahora les toca a ustedes opinar.