Sinopsis: En las colinas de Pesaro, mientras se espera la llegada de los aliados durante el último año de la Segunda Guerra Mundial, Evelina vive en un mundo mágico. La niña está convencida de poder hablar con dos hadas buenas: la Negra, un hada que es oscura, y la Boba, un hada alegre y colorida que siempre ríe.
Cuando Evelina y sus hermanos encuentran el cadáver de un soldado alemán asesinado por los partisanos, la Negra los protege y los obliga a marcharse antes de que lleguen los alemanes.
Sin embargo, Evelina descubrirá un gran secreto: a una chica judía escondida en un agujero en el suelo del granero. El vínculo que establecerá con ella es el hilo conductor de una novela que se mueve la tragedia y la magia, y que cautiva y conmueve desde la primera página.
Reseña: En octubre llegó a nuestro país Evelina y las hadas de la escritora italiana Simona Baldelli.
Comencé a leer este libro porque tenía la palabra «hadas» en el título. Comprenderán que yo esperaba encontrarme con una historia llena de magia tipo «Todas las hadas del reino» pero terminé inmersa en un ambiente de sufrimiento y crueldad que me dejó impactada.
Evelina es una niña de 5 años que vive en las colinas de Italia junto a su familia. Nos encontramos en plena Segunda Guerra Mundial y acá nos hablan de varios grupos de personas distintos: los desplazados que son los italianos que perdieron sus hogares a causa de bombardeos y van avanzando por los pueblos pidiendo que los acojan, los aliados que son los polacos que vienen a ayudar a Italia y los típicos conocidos contrincantes, judíos y alemanes.
Las primeras 100 páginas del libro son introductorias, nos describen el ambiente, la situación económica, la rutina campestre de esta familia, etc. Todo narrado desde el punto de vista de Evelina que junto a sus hermanos tienen la capacidad de ver hadas.
Para mí fue una tortura esta primera parte porque es muy lenta, además no entendía hacia donde apuntaba la historia. Otra cosa que no me agradó mucho es es que hay situaciones descritas que son repulsivas, como el olor de los orinales. Supongo que es para darle más realismo y debo reconocer que es una forma de vida de muchos campesinos alrededor del mundo.
Lo interesante empieza cuando Evelina descubre que en su establo hay una niña y ella le dice que es una princesa pero que no puede salir de su escondite porque todo el que la ve se muere. Esta niña, Sara, es judía y se esconde de los alemanes pero esto no lo sabe nuestra protagonista.
Desde que conoce a Sara, la pequeña Evelina va pasando por distintas situaciones horribles. Encuentra gente muerta en los campos, no comprende por qué la gente odia las cosas que tengan marcada una estrella (la estrella de David), ver bombas que caen es algo normal en su vida y lo más chocante es que presencia la violación de una niña.
El libro es crudo y descriptivo. Si la autora quería hacernos creer que una niña de 5 años nos está contando la historia, yo le creo. La inocencia con la que nos narra las cosas más terribles que puedan imaginar es escalofriante y conmovedora. La niña describe lo que ve pero sin entender lo que sucede, en cambio nosotros sí entendemos el trasfondo de la situación y eso te deja mal.
El libro nos presenta la muerte de una forma bien mística que no entendí del todo pero era bonita para la gente buena. Te da a entender que te vas al cielo sin sufrimiento.
En cuanto a las hadas y la magia, eso queda a criterio del lector. Durante lo largo de la historia, las hadas siempre están presentes en la vida de Evelina, ayudándola y acompañándola pero, como no todos las ven, algunos pueden pensar que eran amigos imaginarios de la infancia y otros pueden creer que en esas colinas de verdad existen las hadas. En los agradecimientos la autora nos asegura de que ella cree que las hadas eran reales.
Evelina y las hadas es un libro que logrará cautivar hasta al más rudo con su dualidad entre crueldad e inocencia. No te dejará indiferente y hará que pienses en que lo que pasa en este libro le puede estar pasando en estos momentos a cualquiera de los niños que están inmersos en las guerras de medio oriente.
«No es cuestión de que fueran malos o buenos. Es la guerra, y en la guerra mueren todos. Buenos y malos. También los niños.»
Le puse 3 estrellas en Goodreads porque, a pesar de no ser lo que buscaba, logró emocionarme.
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