Sinopsis: En un pequeño y céntrico barrio de la ciudad hay cinco mujeres que compran flores. Al principio ninguna lo hace para sí misma: una las compra para su amor secreto, otra para su despacho, la tercera para pintarlas, otra para sus clientas, la última… para un muerto. La última soy yo y ésta es mi historia.
Después de la pérdida de su pareja, Marina se da cuenta de que está totalmente perdida: había ocupado el asiento del copiloto durante demasiado tiempo. Buscando empezar de cero acepta un trabajo provisional en una curiosa floristería llamada El Jardín del Ángel. Allí conocerá a otras mujeres muy diferentes entre sí, pero que, como ella, se encuentran en una encrucijada vital con respecto a su trabajo, sus amantes, sus deseos o su familia. De la relación entre ellas y Olivia, la excéntrica y sabia dueña del local, surgirá una estrecha amistad de la que dependerá el nuevo rumbo que tomarán sus vidas.
Empezaré diciendo que me era totalmente desconocida esta autora. Me llamó mucho la atención tanto su portada como la sinopsis del libro lo cual ha hecho que me sumerja en su lectura, de la cual he quedado maravillada y, aunque quizás se acerque más al público femenino por su argumento y personajes, dejará maravillados a todos por igual sin dejar a nadie indiferente. Gracias a Penguin Random House ya está disponible en todas las librerías.
Mujeres que compran flores se desarrolla en el Barrio de las Letras de Madrid y específicamente en la floristería El Jardín del Ángel donde la vida de 5 mujeres sobre los cuarenta años se verá trastocada por sus flores y Olivia, su administradora. La existencia de estas 6 mujeres se entrecruzará dando paso a una amistad de la cual obtendrán el apoyo y la fuerza necesarias para hacer los cambios debidos para encontrar la felicidad.
Marina, la protagonista, se ha mudado al barrio pasado un año de la muerte de su marido la cual no ha sabido sobrellevar pues, como se catalogará después por Olivia, sufre del síndrome del copiloto haciéndola incapaz de tomar las riendas de su propia vida de las que nunca ha estado al mando. En uno de esos calurosos días de estío se atreverá a cruzar la puerta de la floristería por la que ha pasado incontables veces y que te invita a pasar con un cartel de “no dejes de soñar” donde sorpresivamente recibirá una propuesta de trabajo como ayudante de Olivia y que hará dar movimiento a los engranajes del destino cambiando completamente su vida y de otras 4 mujeres que compran flores: Casandra, la superwoman; Victoria, la omnipotente; Aurora, la bella sufriente y Gala que padece el síndrome de Galatea.
Cinco mujeres con vidas insatisfactorias, que arrastran miedos, frustraciones y complejos, empezarán lentamente al resguardo de las flores del Jardín del Ángel el cambio de la crisálida, una metamorfosis que las llevará a enfrentarse a sus demonios y temores de la mano de la pragmática y sabia Olivia con sus consejos de gurú dando lugar a la belleza de la que no eran conscientes y encontrando la felicidad que les era ajena a cada una de ellas.
Vanessa Montfort ha desarrollado una historia entrañable de amistad con un relato lleno de sensibilidad, emoción e inspiración, que lleva a la introspección en cada lector con una frescura revitalizante y contemporánea del papel que debe enfrentar actualmente la mujer a través de sus personajes, estereotipos de mujeres cercanos y reales no cayendo en el cliché, dando énfasis en el actuar y que la felicidad está en manos propias donde queda patente la frase «el que no arriesga no gana» y que poco importan las normas sociales cuando se trata de la felicidad y su lucha por alcanzarla, porque como diría Olivia: «Vivir es una tarea urgente».
Montfort ha publicado anteriormente otras novelas destacándose la premiada Mitología de Nueva York, por lo que espero que pronto sean publicadas en Chile para seguir deleitándome con sus emocionantes historias.
- Reseña escrita por nuestra colaboradora Nathalia Cortés
Comenta con Nosotros