[Reseña] Starcraft II: Legacy of the Void

El final está cerca, la ultima parte del juego que comenzara en el 2010 ya está disponible, es una épica batalla por la supervivencia de las tres famosas razas que componen el universo del que se ha transformado en el RTS más famoso dentro de la industria. Estoy hablando obviamente de Starcraft II y su ultima iteración Legacy of the Void.

Starcraft II tuvo un lanzamiento algo cuestionado, Blizzard decidió dividirlo en tres partes, prácticamente tres juegos distintos, uno para cada una de las facciones clásicas del juego: Wings of Libery se lanzo en 2010 y estaba centrado en los “Terran”, los terrícolas de la película. Heart of the Swarm lanzado en 2013 se enfocaría en los salvajes “Zegs”, los monstruos de la película. Finalmente Legacy of the Void nos muestra la raza que menos conozco de Starcraft: los Protoss, los evolucionados de la película y nos entrega una satisfactoria conclusión, en la que las tres facciones deben luchar por su sobrevivencia. Lo sé, no suena muy distinto a lo que otros Starcraft prometen, pero créanme, vale la pena, simplemente no quiero escribir tanto detalle aquí porque nadie disfruta cuando le dicen que pasara al final de su película favorita. ¿o si?

En cuanto al juego en sí, Blizzard ha hecho muchas cosas para mejorar Starcraft durante los años, sobre todo en el modo multiplayer que es el más popular del juego. A pesar de esta gran popularidad Blizzard no ha descuidado el contenido de un jugador solitario en ninguna de las tres entregas. Legacy of the Void nos estrega nuevamente una campaña robusta y entretenida, dejando ver al jugador una mayor cercanía con los Protoss., Las primeras misiones ya son un shock para cualquier conocedor de Starcraft y la introducción de numerosos personajes nuevos que se irán uniendo a Artanis en su viaje en la nave de guerra conocida como “The Spear of Adun” hacen de esta otra emocionante e interesante campaña.

The Spear of Adun, es el transporte de los ultimos Protoss y al igual que en las otras dos partes del juego, funciona como base de operaciones para el jugador. Podremos elegir distintas misiones, administrar mejoras de soporte, elegir entre variantes de distintas unidades y hablar con los personajes para conocer distintas visiones de los sucesos de la campaña. Muchas de estas cosas no se encuentran en el componente multiplayer. Muchas de estas habilidades pueden ser usadas de maneras únicas en unidades que normalmente no tendrían estas habilidades, esto hace que la campaña difiera de lo que es un combate contra otra persona.

Otra cosa que me agrado mucho de Legacy of the Void es que es mucho más amigable para los jugadores nuevos y para aquellos que no tenemos tanto tiempo para jugar. Por ejemplo, al empezar cada misión ahora nuestra base ya tiene creadas unidades de recolección de material, que comenzaran a trabajar sin siquiera hacer click, puede no parecer mucho, pero en realidad acelera mucho el proceso de inicio en cada misión, en los juegos anteriores era bastante lento empezar solamente con un trabajador para recolectar minerales.

Otro punto, es la dificultad, si bien Heart of the Swarm(La entrega anterior) fue un excelente juego para mi, tener a Kerrigan de tu parte lo hacía extremadamente fácil, era muy poderosa, quizá es exactamente eso lo que querían mostrar, el poder se controlar a “The Queen of Blades”, el punto es que ahora en verdad uno se siente apuros, estar en plena construcción de tu base y escuchar “el enemigo dirige un ataque en nuestra contra” vuelve tenso el aire de manera inmediata.

El último componente fuera del brutal multiplayer son unas, totalmente nuevas, misiones cooperativas, en las que dos jugadores podrán elegir entre héroes del universo Starcraft y guiar sus ejércitos en contra de distintos retos contra enemigos controlados por inteligencia artificial. Entre los héroes que podemos escoger están: Raynor, Kerrigan, Artanis, Swann, Zagara y Vorazun. Cada uno tiene distintas habilidades que se podrán ir desbloqueando por un sistema de experiencia exclusivo para este modo de juego. Jugar cooperativamente tiene muchas posibilidades, jugadores más expertos podrán dar guías a los más novatos y además da un gran grado de entretención sin necesidad de enfrentar a dos buenos amigos uno contra el otro. Este es un modo de juego que nunca antes habíamos visto en Starcraft y si bien, en cuanto a historia o sentido no tienen mucha profundidad, los objetivos y misiones hacen que este modo realmente se sienta único con cada juego.

En conclusión, para aquellos que no se sientan lo suficientemente confiados como para ingresar a la brutal competitividad del multiplayer del juego estarán satisfechos con el reto de la historia donde, a medida que progresas, deberás administrar tus unidades en el campo de batalla y tomar decisiones sobre mejoras de tus unidades lo hacen más que suficiente como recompensa de juego.

Blizzard ha cambiado constantemente el multiplayer de Starcraft II desde su primer lanzamiento en 2010, arreglando pequeños detalles y algunas mecánicas para balancear los combates, sin embargo, una expansión trae grandes cambios a los juegos competitivos. Nuevas unidades para cada facción se traducen en nuevas estrategias de ataque y defensa a la que los jugadores se deben adaptar si quieren sobrevivir, ya no basta con el conocimiento que se tenía en Heart of the Swarm, y este sería el único punto en contra que le daría a Starcraft II en este momento, la curva de aprendizaje para entrar al mundo del multiplayer, es demasiada la diferencia entre alguien que tiene experiencia y alguien que no, por lo que entrar en este mundo y avanzar en victorias se hace algo tedioso y frustrante, no porque el juego en si sea malo, si no que por que hay muchísimo que aprender y agregar nuevas mecánicas y unidades no ayuda mucho en esto.

Dicho todo esto, Starcraft II sigue siendo una experiencia enriquecedora en cuanto a multiplayer, no es sin razón que sea llamado “El major RTC del Mercado” y es que para cualquier fan de las estrategias con ejércitos este es un juego obligatorio en su arsenal.

Por otro lado, para aquellos que vengan de Heart of the Swarm y ya sean unos maestros de la estregia, todos estos cambios son algo bueno, con mapas adicionales y nuevas unidades.

Legacy of the Void es una conclusión digna para una saga de esta envergadura, tiene todo lo que se puede esperar viniendo de Blizzard en términos de contenido. Me impresiona darme cuenta que luego de cinco años desde la salida de la primera parte los desarrolladores aun puedan mantener el juego con cambios frescos e interesantes, además de entregar opciones para un alto rango de jugadores, no solo a los que están hace años dentro del universo de Starcraft, sino también a aquellos que disfrutan de jugar solos o de una muy buena historia.