SINOPSIS:
Liderados por Starfire, los Teen Titans (Beast Boy, Raven, Blue Beetle, Robin y el recientemente regresado Nightwing) han construido un equipo cohesionado en su batalla sin fin contra el mal; pero el nuevo miembro del equipo, la misteriosa y poderosa Terra, quizás esté alterando su dinámica. Mientras tanto un antiguo mal, Brother Blood, ha despertado y el conocido villano Deathstroke está acechando en las sombras por lo que ambos están esperando para atacar de forma inesperada.
RATING: [4.5/5]
RESEÑA:
Ya se encuentra disponible la octava cinta animada de DC Comics, ésta vez nuestros Jóvenes Titanes se enfrentarán a nuevos enemigos, conoceremos más a fondo sus historias y entenderemos por qué el «contrato de Judas», todo esto y más en la siguiente reseña por Canal Freak 😉
En esta nueva entrega, veremos peleas cuáticas con nuevos villanos, momentos emotivos acerca del valor de la amistad y también un sinfín de situaciones bacanosas, ¡como el día en que la princesa Koriand’r de Tamaran se une a los Teen Titans como Starfire!
Al igual que la película anterior, conocemos más a fondo las historias de vida que tienen nuestros protagonistas y cómo se volvieron parte de este selecto grupo de jóvenes que arriesgan todo a la hora de salvarnos de los malos.
Recordemos que en la escena post-créditos de la película anterior vemos la llegada de Terra a la sede de los Teen Titans, y es aquí en donde se desarrolla la trama, puesto que conoceremos quién es realmente esta chiquilla, cuál es la historia de su vida y cómo ha sido su año en la Torre con sus compañeros de batallas.
También vemos como se van generando vínculos entre ellos, y aquí es Beast Boy quien juega un papel importante dentro de la historia (1313). Y por otro lado, existe una pequeña rivalidad entre Damian (mi favorito) y Terra, ya que como este cabro chico es bien antipático y llevado a su idea, cacha que algo le pasa e intenta averiguar por su parte…
En cuanto a los villanos, me parece bacán que Brother Blood sea un líder medio místico con un plan bastante maldito; por otro lado, interesante la conexión con que tiene con Deathstroke, éste loco sí que es malo, no le importa nada a la hora de hacer tratos.
Ya pa’ ir terminando, es importante mencionar que a lo largo de la película ciertos personajes tiran varias tallas en doble sentido haciendo que el film sea medio «picarón», sacándonos carcajadas y haciéndonos sonrojar ante éstas irreverentes actitudes medias cochinonas.
Si hay algo que me gusta de las películas animadas de DC, es la forma en la cuál nos muestran las batallas internas de nuestros héroes, sus peores miedos, lo que les ha tocado vivir, pero sobre todo esto, lo valioso que es la amistad y sentirse parte de una familia.
«Creo que el dolor es lo que forma a un héroe, es como una presión que puede volverte un diamante o pulverizarte por completo»
Con amor y cariño,
Lucas Wayne P.
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