En el año 1999, una producción colombiana logró traspasar sus fronteras y hacerse famosa a nivel latinoamericano. En Chile dicho éxito también se presentó, e incluso nuestra Miss Universo Cecilia Bolocco, tuvo una pequeña participación dentro de la novela.

Es la historia de la telenovela colombiana Yo Soy Betty la Fea, interpretada por Ana María Orozco, con un elenco que quedó en la retina de los telespectadores.  El suceso llegó a tal, que las horas de trabajo para el equipo se hicieron extenuantes, llegando la telenovela a superar los 300 capítulos.

La principal fortaleza de la historia era la pureza de su protagonista, una mujer fea pero muy inteligente, que llega a trabajar al mundo de la moda, negocio donde la imagen lo es todo. Muchos nos enamoramos del personaje y de la forma en que ésta se enamora perdidamente de su jefe Don armando. Éste, un mujeriego empedernido, cuyo novia Marcela trabajaba en la misma empresa donde él ejercía como presidente, la mítica empresa Eco Moda, una empresa familiar.

La historia fue replicada en varios países como México por ejemplo, e incluso Estados Unidos. En la versión Norteamericana en inglés  se llamó  Ugly Betty, interpretada por América Ferreira que mi opinión personal, no logró llegar a la esencia de los personajes, en una historia que fue bastante modificada en relación a  su versión original y realmente consideró, que no es la mejor versión de la historia. Pero es necesario reconocer que si tuvo bastante o moderado de éxito a nivel de telespectadores en Estados Unidos y por unas partes de latinoamérica.

Dentro de las novedades que tuvo Netflix el mes pasado fue justamente la incorporación del clásico colombiano de 1999 dentro de su plataforma, pero junto con ello presentó una nueva versión que Telemundo realizó este año 2019 emitida en Estados Unidos entre febrero y agosto de esta exitosa novela.  Dentro de lo interesante está la forma que logró refrescar la historia actualizándola, en un mundo completamente diferente al que se presentaba a finales de los años 90, esto es, un mundo con redes sociales como Instagram o Facebook y donde la forma de comunicarse es muy diferente a los años en que la novela salió al aire con teléfonos inteligentes, whatsapp, etc.

Sinopsis

Betty es una joven latina en Nueva York quien al ser  rechazada en múltiples empleos, acepta uno por debajo de sus calificaciones en la industria de la moda. En medio del glamour y los negocios, de la guerra entre las bonitas y las feas, Betty crece y se enfrenta al mayor reto de su vida: el amor.

Reseña

Le di una oportunidad a esta nueva versión que logró ser primera sintonía en USA entre el público latino este año, y realmente tengo que reconocer que es muy entretenida. Logra tomar gran parte de los elementos que hicieron exitosa a la serie original en sus 123 episodios, con personajes muy bien definidos y desarrollados e incluso en algunos aspectos o casos mejor trabajados que su versión de los 90. Si bien es cierto algunos elementos dentro de la historia tuvieron que ser cambiados, esta actualización justifica sus cambios y hacen  que la historia se haga más entretenida, al no ser completamente calcada a la versión predecesora. Personalmente encuentro que el  personaje Armando es un poco más entretenido en esta versión,  más lúdico. Betty adorable,  simpática y en gran parte de los demás personajes, es imposible no recordar  algunos elementos de los personajes que los inspiraron.

Si bien el look o circunstancias de algunos son un poco diferentes a la versión noventera, esto actualizo mucho a los mismos. De hecho los actores de esta nueva versión, en algunos aspectos incluso logran hasta tonos de voz similares a los intérpretes originales.

Otra de las características de esta serie, es que su principal foco es presentar distintos tipos de historias y problemáticas, desde la perspectiva de la mujer. Una visión actualizada de lo que es ser mujer en estos años donde no existe solo una realidad o una forma correcta de serlo.

Tal como ocurrió con la versión que le inspira, si bien se trata de una telenovela, con características dramáticas, posee un aspecto lúdico que permite que el espectador disfrute con un poco de humor. El cuál está muy bien dosificado, creando situaciones simpáticas, lo que ayuda por ejemplo, dada la contingencia actual en el país, que uno se distraiga y se relaje dentro de todas las complicaciones de la vida diaria.

En mi caso resultó ser adictiva, donde no era posible ver sólo un episodio diario. Con capítulos de aproximadamente 45 minutos de duración,  finalmente terminaba tras mi extenuante día viendo una hora y media o un poquito más de teleserie.

A nivel de fotografía y de producción, la serie también sobresale por su calidad.  Grabada entre Miami y Nueva York, logran sacar una fotografía de la ciudad donde se supone se desarrolla la historia, lo que también la hace atractiva de ver.

En resumen, una excelente adaptación y actualización de una historia que por su universalidad de los temas, no pasa de moda. Sólo debe reinventarse en algunos detalles a las características de la vida en el siglo XXI, pero cuyas problemáticas siguen siendo vigentes e importantes de tratar y comunicar. Los invito a darle una oportunidad a esta teleserie, a reírse de buena gana con las locuras de los trabajadores de V&M y enamorarse de Betty y su Don Armando.

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