[Reseña] The Last Dance: El Ascenso de Jordan y la polémica franquicia de los Bulls

Durante esta cuarentena el contenido cinematográfico ha tenido preocupantes pausas y para nosotros, los cinéfilos, ha sido un punto débil a lo que consideramos una actividad de ocio bastante gratificante. De esta forma, los medios streaming han suplido en gran parte ese espacio vacío que dedicamos a observar en una pantalla alguna historia por conocer y así matar el tiempo.

Bajo esta premisa, Netflix ha barajado en sus estrenos y tipo de público para llegar ahora, a los fanáticos de uno de los deportes con mayor incidencia en la cultura gringa: El Básquetbol.

La miniserie está dirigida por Jason Heir (director que ha trabajado en diversas producciones relacionadas con el deporte) y a la participación en la producción de ESPN, NBA, Jump23 y por supuesto, Netflix. Con un total de 10 episodios, en los que nos regresan a los inicios y siguiente ascenso de uno de los mejores jugadores en la historia del Basquetbol y en el potente equipo que, junto al esfuerzo de todo un plantel, catapulto a los Chicago Bulls con un total de 6 títulos en la NBA cambiando para siempre el juego y estrategia de este deporte.

Con una duración de 50 minutos por episodio, la mini serie nos presenta al famoso equipo de Chicago en su apogeo más alto; el último título que gana bajo la mano de Jordan en el 98’, y desde este punto cronológico, realiza un vaivén temporal abordando en parte de la historia de los jugadores de esa temporada y la de los campeonatos anteriores y, sin dudas algunas, en el MVP de largas temporadas, referente deportivo, cultural y quien es reconocido por varios, como el jugador que cambió el basquetbol para siempre: Michael Jordan.

A medida que avanza cada capítulo, podemos recordar momentos memorables en la carrera de Jordan que no solo radican en su desempeño en cada juego o campeonato, sino que también como referente en la cultura “mercantil” del basquetbol a nivel mundial, su paso por el béisbol, el entrenamiento mental y físico, la polémica y dolorosa muerte de su padre y por supuesto, su desempeño en cada juego. Todo esto mientras el recuerda en su lujosa casa, sentado en un sillón junto a un vaso de whisky un puro.

También podemos ver a quienes fueron, dicho por el mismo Michael, jugadores claves en su carrera y por supuesto, en el equipo de baloncesto; Scottie Pippen, Dennis Rodman, Steve Kerr y gran mayoría del plantel que la NBA tuvo durante los maravillosos años 90, década que dejó estos y otros más jugadores de antaño, dignos de imitar y que siempre serán un referente en este deporte.

El título de esta miniserie proviene de la última jugada quien era entrenador de los Bulls, Phil Jackson. El ex jugador esquematizó, tras el anuncio de su último año como entrenador del equipo, la jugada maestra que dejó tras varios años, a los toros de Chicago, como uno de los equipos más importantes.

La salida Phil provino desde uno de los cabecillas de la franquicia, Jerry Krause, con quien el 23 y gran parte del equipo tuvo constantes discusiones que netamente radicaban en la burocracia del baloncesto, hecho que también marca un antes y un después en el rubro.

Durante el trayecto de cada capítulo podemos ver imágenes exclusivas, de una fotografía espectacular; ver entrevistas a importantísimos jugadores de la disciplina, fanáticos del baloncesto como Barack Obama, Justin Timberlake, periodistas y especialistas en él deporte, empresarios y la intimidad de muchos de ellos.

¿Y si no sé nada de Basquetbol?

Probablemente muchos freaks desconocen los nombres que previamente mencionamos, ya sea por el factor de edad, gustos o hobbies, pero todos reconocemos el símbolo que hoy en día es Michael Jordan y es en ese punto en donde el director da en el clavo; la mini serie puede ser perfecta para un fanático, pero ridículamente divertida para quién quisiera saber “el lado B” de los años 90 en el basquetbol.

Las polémicas tras su estreno

Si bien la serie posee el nombre de la jugada maestra de Jackson, es casi inevitable pensar en el protagonismo obvio de Jordan dentro de ella. Ya sea del gusto de algunos o de otros, el número 23 es y será importantísimo en la evolución del basket. Es por esto, que gran parte de la visión en la historia es narrada desde la mirada de Jordan, siendo este punto el que ha causado revuelo tras el estreno de su último capítulo el pasado 18 de mayo.

Grantt, quien también aparece en la mini serie, comentó en una reciente entrevista a ESPN que prácticamente casi todo lo dicho por Michael es una mentira, refiriéndose particularmente en su incidencia respecto a la entrega de información al periodista, Sam Smith, quien reveló en un libro el lado oscuro del 23 respecto a su trato con sus compañeros y su supuesta adicción a las apuestas. Respecto a este trato hostil, desafiante y carente de empatía de Michael con sus compañeros, es mencionado en varios episodios por los ex jugadores como por él mismo, lo que incluso lo hace quebrarse; la convivencia y trabajo en equipo con el mejor jugador de la NBA no era fácil.

Siguiendo en polémicas, Scottie Pippen, también mencionó en una entrevista su descontento en como la producción solo focaliza las jugadas de Michael y a él sólo lo intentan “dejar mal” respecto a momentos difíciles en su carrera.

Diversas son las opiniones de quienes vivieron en carne propia la adrenalina del basquetbol en los años que marcaron un hito en el deporte a nivel mundial y por supuesto, diversos son también los comentarios de espectadores y fanáticos, quienes han logrado que la serie sea una de las más vistas en la plataforma, descargada en otras y con un porcentaje de 97% en Rotten Tomates.

Como fanática del basquetbol, fue una serie que disfruté con cada semana de sus estrenos (ahora puedes encontrarla completa) reviví jugadas que recuerdo haber visto más pequeña, pude unir lazos entre personajes y jugadores, aprender de jugadas, estrategias, conocer mucho más a quienes en su gran mayoría podemos ver desenvolverse en el basket actual como comentaristas o entrenadores. Fue emocionante ver todo lo que tuvo que pasar cada jugador antes de poder obtener un campeonato, fue potente saber aspectos personales de quien es un símbolo en la infancia de muchos, ya sea por el deporte, la cultura sneakers e incluso en dibujos animados con su icónica aparición en Space Jam.

Dicho esto, dejo invitada a todo seguidor de esta extenuante y tan bella disciplina deportiva a averiguar capítulo tras capítulo parte de la historia de un equipo que dio en cada juego, un espectáculo elegante de rebotes, triples, dobles, tiros de campo, bloqueos y cross over, así como también a divertirse con anécdotas, emocionarse con momentos dolorosos, recordar enemistades y por supuesto, pasar un buen rato disfrutando de capítulos sumamente bien dirigidos.

Disponible en Netflix mini series, te dejo invitado a ser un jugador más en los Bulls del 98 y vivir desde un puesto más cercano en el estadio, las jugadas claves en la historia del basquetbol.