«El carisma puede ser un arma poderosa»

El siguiente análisis incluye spoilers moderados y comprende los números 41 al 43 de More than meets the eye segunda temporada.

Visitantes llegan a la lost Light, y cuando eso pasa, cualquier cosa puede ocurrir.

La historia

Después de los eventos ocurridos en la revisión anterior, nos encontramos con un particular grupo formado por Nautica, Getaway, Brainstorm y Skids que está haciendo nada, hasta que Rod da un muy llamativo aviso a ellos y el resto de la tripulación: Han encontrado a la Vis vitalis.

Como recordarán, el primer nuevo objetivo tras los eventos de Dark Cybertron era localizar a Thunderclash, ya que él había asegurado tener sueños con los caballeros de Cybertron, y con esa información llegarían con mayor rapidez a destino. Sin embargo, el carismático líder está afectado por una enfermedad y su muerte se aproxima.

En la nave no solo están sus habituales acompañantes, sino un grupo de camiens entre los que destaca Firestar, una amiga de Nautica que no parece entender que le causa incomodidades con su actitud avasalladora. Se está celebrando una fiesta en honor al líder, pero no todos están de gusto por la celebración.

Por un lado, Fist aid estudia a Thunderclash en compañía de Velocity, y descubren que el bot está intentando comunicarse y advertir de un peligro; al mismo tiempo, Ravage huye de algo que en apariencia sólo puede ver el en los pasillos de la nave.

Mientras esto ocurre, Getaway y Nightbeat van tras la pista del felino y terminan en la morgue de la nave, al mismo tiempo que Nautica y Skids por su lado debaten sobre la amistad y las relaciones interpersonales. De pronto ambos duetos se encuentran con unos misteriosos y amenazantes seres, que hasta ese momento habían pasado desapercibidos.

Todos quedan bajo ataque y en lugares cerrados al mismo tiempo; Getaway y Nightbeat logran escapar gracias a la ayuda de Ravage, quien tiene experiencia con camuflaje y sabe cómo manejarse con este tipo de seres, Skids queda herido y Nautica lo salva por milímetros, y en la bahía médica, Thunderclash despierta sorpresivamente y saca de apuros a los médicos y a Minimus, indicando que él puede detener a los enemigos.

Los tres grupos se reúnen en otro punto de la nave, y allí se encuentran con Firestar; Nightbeat llega a la conclusión de que esos seres son parásitos que tienen la capacidad de usar camuflaje visual, y además se alimentan de la energía vital de los robots, pero principalmente de aquellos con un destacado carisma. Como Thunderclash. Justo cuando las cosas se ponen ardientes porque los parásitos los han encontrado, Megatron y Rod aparecen gracias a un llamado de los hidrobots, y su presencia elimina a estos seres.

Con las cosas regresando a la normalidad, salvo por las muertes de Photon, Skystalker, y Countdown, hay algo bueno y es que los parásitos, en su afán por alimentarse de Thunderclash, actuaron como un agente regenerador, y esto significa que aunque aún no está en las mejores condiciones, ya no necesita el soporte de la nave.

Con Velocity integrándose a la nave, surge un nuevo problema cuando Swerve cae enfermo, y un planeta se materializa tras la Lost light. Después de unos análisis, descubren que lo afectó una infección por óxido, la que ha hecho que su mente inconsciente materialice con el proyector de hologramas un planeta con los elementos de las comedias terrestres que ha estado viendo en el último tiempo. Al usar esa cantidad tan grande de energía, ha perdido el conocimiento y a menos que encuentren a su avatar, morirá.

Así las cosas, Megatron, Tailgate, Cyclonus y otros usan sus propios avatares para ir al planeta y localizar al perdido dueño del bar. Cuando consiguen hacerlo, este duda acerca de volver a la realidad, pero finalmente se convence y regresa.

Pero las sorpresas no terminan, porque First aid descubre que la lesión por óxido no es casual, sino que fue ocasionada por una bala que nunca advirtió, y que lleva siglos alojada en su hombro. Y esta bala tiene información de un infiltrado autobot entre los cons.

Team creativo

Argumento:     James Roberts

Arte:                Alex MIlne

Color:              Joana Lafuente

Letra:               Tom B. Long y Chris Mowry

Esta aventura doble Tiene varios mensajes dentro y pienso que es interesante que el equipo se haya hecho cargo de ello: en primer lugar, profundizan un poco en las relaciones interpersonales en Caminus, lo que deja a la vista cosas que no hemos apreciado en Rid. Puede que allá no haya habido guerra, pero el concepto de amistad es muy exagerado, al punto que si alguien “rompe” una amistad, es socialmente mal visto; no es guerra, pero de todos modos es una forma de pérdida de la objetividad.

El otro asunto es una declaración de intenciones del equipo. La aventura de Swerve es una excusa para decir que saben que la tripulación ha hecho muchas cosas, que es difícil sorprender y que el salto del tiburón ya es algo palpable.

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Nos leemos en pocos días en el siguiente análisis: Rid T204

 

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